Debido al increíble impacto que han tenido las redes sociales en el mundo de los negocios y el marketing, se tiende a confundir o a reducir el significado de marketing de contenido con periodismo, blogging y la creación de anuncios. La simplificación de alguno puede traer consecuencia negativas para el emprendedor que incursiona en el mercado con miras a un posicionamiento efectivo.

El año en curso, casi a punto de finalizar, ha traído cambios para el marketing en general y para el marketing de contenido, todavía, una de las herramientas más efectivas para que el emprendedor pequeño o mediano le haga frente a sus desafíos y compañías más grandes, en su conquista por un espacio propio.

El marketing de contenido y otros medios

Debido a su amplio espectro de aplicación, el marketing de contenido, como se ha mencionado, tiende a confundirse con otros medios. Incluso hay personas que le restan importancia.

Sin embargo, es difícil negar que la industria del marketing tiene un papel importante dentro del mercado. Quizá, más que en otros momentos de la historia.

Detrás de esto está la creciente creencia en la industria y en el marketing de contenido por un gran sector que juega un papel en la economía. El empresario inteligente, sabe que una forma de publicidad efectiva es aquella en la que se camufla, por ejemplo, marketing y periodismo.

De esa manera, se puede obtener una contribución valiosa de ambos y competir con medios y empresas de mayor alcance. Cadenas de televisión, medios de comunicación radial, entre otros.

Pero el marketing de contenido es algo más que verdades ordenadas. Su trabajo es agitar y catalizar el interés de un sector determinado de una comunidad, atraer al cliente potencial hacia un servicio o producto. De una manera oculta, es cierto, pero siempre elegante y sofisticada.

Críticas al marketing de contenido

Durante el auge del marketing de contenido, cuya influencia solo sigue creciendo, hay críticas. Unas más válidas que otras. Una de las críticas utiliza un argumento que sostiene que la capacidad que tiene el marketing para absorber otras formas y medios de comunicación para sus objetivos, corrompe el discurso de los mismos.

En otras palabras, la falta de distinción entre una práctica y la otra, según la crítica, hace que el medio que se utiliza para una campaña de marketing pierda prestigio y objetividad. Al estar enfocado en mantener clientes habituales y atraer nuevas audiencias, el marketing de contenido podría tener tal efecto.

Una posible solución para el problema mencionado, podría ser la creación de una legislación para hacer del marketing algo que deba estar claramente marcado como un anuncio para los usuarios.

Un experto sobre la materia, declaró lo siguiente:

“La falta de etiquetado de los productos publicitarios en el marco del marketing de contenidos tiene consecuencias fatales en los tiempos en que los medios de calidad a los portales de información crítica son difamados como “prensa mentirosa”. La simulación del periodismo a través del marketing de contenidos finalmente juega en las manos de los populistas. Porque los límites entre la información y la publicidad son cada vez más borrosos”

Como se podrá apreciar, los puntos que hace la crítica sobre el asunto van más allá de lo económico y tocan temas que afectan a la población en términos políticos y sociales. Otra razón para ver el alcance tangible que tiene la publicidad en nuestros días y, por eso, tomarla en serio y asumirla con la responsabilidad que amerita.

Hacia el 2019

Una vez planteado lo anterior, solo parece inevitable que el marketing siga creciendo. Ya se ha visto cómo la utilización del marketing de contenido en otros discursos, como el periodismo y la política, puede ser peligrosos.

En los Estados Unidos, el caso de la supuesta manipulación de las elecciones ha tomado la postura de la crítica, para decir que se intentó impartir una visión sistemáticamente unilateral de la realidad.

En el escandalo se han visto involucrados gigantes de la industria del marketing y de las redes sociales como Facebook y su CEO, Mark Zuckerberg.

El año que viene, es probable, la polémica seguirá. Una solución que se mantiene sobre la mesa es la utilización de la tecnología Blockchain como una manera de crear controles menos invasivos para el sector publicitario y para el usuario.

La proliferación de redes sociales como Steemit, que recompensa monetariamente a cada usuario, le da más poder al ciudadano común. Y podría entender como una manera lucrativa y eficiente para hacer frente al tema del marketing de contenidos, por ejemplo.

Desafortunadamente todavía esta tecnología y sus aplicaciones sobre de alta volatilidad y son propensos a bajas y altas en sus costos de producción.

Sobre todo esto, parece mejor asumir la postura de Carsten Matthaus de la empresa SZ Scala cuando afirma que:

“El marketing de contenidos no mata otras industrias, las desafía”

Muchos anunciantes confían cada vez más en el contenido de su marketing, porque la publicidad tradicional en el dominio digital funciona con peor desempeño sin un contenido sólido.

Mientras tanto, la “gestión narrativa de la marca” ha creado una industria en pleno auge. La mezcla de publicidad y otros medios funciona de maravilla para los estrategas de la marca, puede que sea el inicio de un mercadeo cuya consumación sigue en desarrollo.

Artículo con fuentes de la revista Forbes, Entrepeneur y Criptozoom.